De acuerdo con la Real Academia Española, la palabra carruaje proviene del provenzal “cariatge” y la define como un vehículo formado por una armazón de madera o hierro, montada sobre ruedas. Los carros de transporte reciben diversas denominaciones en función de sus características. En los de personas, los términos utilizados para los vehículos de tracción animal son coche de caballos o diligencia
A finales del XVIII, nace un sistema de coches de alquiler con parada fija que ofrecía servicios por horas o trayecto, un antepasado del taxi. Cierto es que el servicio de alquiler de medios de transporte ya existía desde el siglo XVI con las sillas de mano y las mulas. Sin embargo, fue un 14 de septiembre de 1792 cuando el rey Carlos IV aprueba la creación de los coches diligentes. Su beneficiario será don Francisco de Tolosa.
Los coches eran tirados por dos mulas y el cochero iba vestido con librea, casaca, calzón verde, chaleco y botonadura dorada. Los puntos de encuentro de estos coches fueron: la Plaza de la Cebada, la Puerta del Sol y la cuesta de Santo Domingo, con un servicio de 7:00 a 13 de la tarde y de 15 a 23:00 de la noche, de abril a septiembre y en invierno una hora menos, excepto cuando había toros y teatro.