Una de estas nuevas obras de las que se enriquece el Museo del Prado es el Busto de mujer realizado en 1943. Es la respuesta del pintor Picasso en plena II Guerra Mundial, muy diferente del resto de sus retratos de esa época, radicalmente distorsionados. Permanecerá cinco años en el Museo del Prado, en la sala de retratos del Greco, gracias a la generosidad de la Aramont Art Collection de la familia Arango Montull a los Amigos americanos del Museo del Prado. A este deposito se suma, la aceptación por parte del Real Patronato del Prado de la donación del Retrato de Felipe III de Velázquez, que ha estado en deposito desde el 2016.
La ubicación de estas obras ha provocado de nuevo la polémica, ya iniciada entre el Prado y el Reina Sofia, desde que por Real decreto de 1995 se separaron ambas colecciones a partir de 1881, año del nacimiento de Picasso.
Esta disputa entre los dos museos lo inició la compra de La Boloñesa de María Blanchard por el Prado, cuando la artista tiene en el Reina Sofia 15 obras expuestas.
En cuanto al retrato del rey Felipe III de Velázquez,1627, fue identificado en el 2015 como parte del gran cuadro de historia, La Expulsión de los moriscos de 1627, que realizó el pintor sevillano compitiendo con Carducho, Eugenio Cajes y Angelo Nardi y que desgraciadamente se perdió en el incendio del Alcázar en 1734. Velázquez no conoció al monarca que falleció en 1621 y por ello tuvo que inspirarse en retratos ajenos. Tiene un carácter abocetado demostrando el método de trabajo del pintor.

Una vez más se despiertan alicientes para seguir disfrutando del Museo del Prado y desde Callejearte Madrid queremos que descubras cada uno de ellos y te enamores más del arte en su conjunto. ¿Te animas a conocer las nuevas obras que enriquecen al Museo del Prado?