Descubre la fascinante historia detrás de la Fuente de los Niños, una obra emblemática del escultor Mariano Benlliure que ha dejado una huella perdurable en la historia de Madrid y más allá. Desde su origen en el siglo XIX hasta su ubicación actual en la Fundación del Canal de Isabel II, esta fuente ha sido testigo de numerosas transformaciones y aventuras.
La Fuente de los Niños, creada por Mariano Benlliure, se encuentra desde el año 2001 en la Fundación del Canal de Isabel II, situada en la calle Mateo Inurria, 2, bajo el depósito elevado de la Plaza de Castilla. Esta obra es una de las joyas del escultor, reconocido por su talento y maestría en el arte de la escultura.

retrato de Leopoldina por su cuñado Juan Antonio

fotografía de Lucrecia Arana
Aunque la placa junto a la fuente indica que proviene del jardín de la Casa-Estudio del escultor en la calle de José Abascal, la historia real es que perteneció al antiguo cónsul de Guatemala, Sr. Traumann. Después de ser restaurada, la fuente fue trasladada al vestíbulo de entrada a la Sala de Exposiciones de la Fundación, donde reposa sobre una lámina de agua rectangular.
La vida de Mariano Benlliure estuvo marcada por eventos significativos que influyeron en su obra. Desde su matrimonio en 1886 con Leopoldina Tuero O’Donnell hasta su relación con la famosa cantante de zarzuela Lucrecia Arana, cada experiencia dejó una huella en su arte. La casa-estudio de Benlliure en la calle José Abascal se convirtió en un lugar de encuentro para personalidades destacadas de la época, donde la creatividad y el intercambio cultural fluían sin cesar.
La Fuente de los Niños, una de las creaciones más destacadas de Benlliure, fue admirada por muchos visitantes de su casa, quienes deseaban tener una réplica en sus propios jardines. Esta demanda llevó a la creación de varias réplicas de la fuente, algunas de las cuales se conservan hasta el día de hoy en diferentes lugares de España.
Una de las réplicas más famosas de la Fuente de los Niños se encuentra en la Fundación del Canal de Isabel II, donde sigue cautivando a los visitantes con su encanto y belleza. Esta fuente es un testimonio del legado artístico de Mariano Benlliure y su contribución al patrimonio cultural de Madrid.
A lo largo de los años, la Fuente de los Niños ha sido objeto de admiración y estudio, destacando la maestría técnica y el talento artístico de su creador. Hoy en día, esta obra sigue siendo un punto de referencia en el paisaje urbano de Madrid, recordándonos la importancia del arte y la creatividad en nuestras vidas.
Explora la historia de la Fuente de los Niños de Mariano Benlliure y déjate inspirar por su belleza y significado en el contexto del arte español.



