Efemérides

SE INAUGURA EL PARQUE ROMA. 27 DE MAYO DE 1980

En el barrio de la Estrella, entre el bullicio de la M-30 y la calma de las viviendas vecinales, se inauguraba un 27 de mayo de 1980 uno de los parques más emblemáticos del distrito Retiro: el Parque Roma. El acto contó con la presencia del entonces alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván, y del presidente de la República de Italia, Sandro Pertini, como recogen las crónicas del diario ABC del día siguiente. Un evento que sellaba la amistad entre España e Italia y dotaba al barrio de un nuevo pulmón verde.

Los terrenos que ocupa el parque eran conocidos hasta entonces como Campos de la Campana, un erial polvoriento salpicado de campos de fútbol de tierra, improvisados con postes y largueros blancos. Las laderas que descendían hacia la M-30 estaban cubiertas de vides y maleza. Frente al parque se construirían pocos años después las piscinas del Centro Deportivo M-86, con motivo del Mundial de Natación de 1986. En las cercanías, el Colegio Montserrat y el Instituto Montserrat anclan la vida escolar de la zona.

El Parque de Roma nace como símbolo de los valores culturales compartidos entre España e Italia. En su interior se erige una imponente reproducción del taurobolio de Mérida, un altar romano del siglo II d.C. dedicado a sacrificios rituales. El original se conserva en el Museo Arqueológico Nacional. La réplica, de mayores dimensiones, luce una inscripción conmemorativa del acto de inauguración, recordando ese lazo de hermanamiento entre pueblos mediterráneos.

El diseño del parque fue obra del urbanista y arquitecto Eduardo Mangada, por entonces concejal del Ayuntamiento y más tarde consejero de Política Territorial en la Comunidad de Madrid. Esta sería su última gran intervención urbanística en la ciudad. Mangada concibió el parque como un espacio inclusivo, moderno y sensorial. Dispone de amplios paseos arbolados, cuatro zonas de juegos infantiles, un jardín para invidentes con plantas táctiles y aromáticas, un lago artificial, y un original rocódromo de 12 metros de altura para practicar escalada, acompañado de una zona de búlder.

Uno de los elementos más característicos del parque es el gran escudo de Madrid que adorna el suelo, originalmente hecho de flores naturales y actualmente conservado en hormigón azul y blanco, aunque con el paso de los años ha perdido parte de su colorido inicial.

El Parque Roma ocupa unas 11 hectáreas y alberga más de 4.000 árboles de distintas especies, lo que lo convierte en el segundo parque más grande del distrito de Retiro, solo superado por el colosal Parque del Retiro, con sus 118 hectáreas. Además de su función recreativa, el Parque Roma actúa como pantalla acústica y visual que protege al barrio de las molestias generadas por la M-30.

Lugar de encuentro para generaciones de vecinos, espacio para pasear, correr o simplemente sentarse bajo la sombra de un árbol, el Parque Roma sigue siendo hoy, más de cuarenta años después, un testimonio vivo de cómo la ciudad puede transformarse para respirar mejor.

Deja un comentario