En pleno corazón del Madrid más castizo, en la calle Carlos Arniches, 3-5, se encuentra la Corrala de Arniches. Ubicado en el Cerrillo del Rastro, este edificio fue construido hacia 1860. Funcionaba como galería comercial, parada de carros en la planta baja, y viviendas y posadas en su primera planta y las buhardillas. A pesar de su lamentable estado de conservación, estuvo habitado hasta la década de 1990.
La acción conjunta del Ayuntamiento y la Asociación «La Corrala» evitó su demolición. Fue rehabilitado según el proyecto del arquitecto Jaime Lorenzo, respetando el conjunto original y creando un sótano a partir de los antiguos pilares de madera en torno al patio central. Se reconstruyó la primitiva fuente-abrevadero que había en un lado del patio, trasladándola al centro. Su fondo acristalado permite iluminar el sótano, donde se desarrollan exposiciones temporales. Aunque las obras concluyeron en 2008, no se abrió al público hasta 2012.

El Museo de Artes y Tradiciones Populares, inaugurado en 1975 en la Universidad Autónoma de Madrid gracias a la donación de doña Guadalupe González-Hontoria y Allendesalazar, se trasladó al Corralón en 2011, compartiendo sede con el Centro Cultural.

Desde el 11 de diciembre de 2023 hasta el 2 de marzo, en el sótano del Corralón se celebra la exposición «Luis Miguel Domínguez: En busca de la vida; naturaleza y etnografía».
Luis Miguel Domínguez, nacido en Madrid en 1963, es naturalista, ecologista y director de series de televisión sobre naturaleza. Además, es miembro de la junta directiva de entidades como Adena/WWF, Greenpeace, Survival International y Watu, y presidente de la Asociación Lobo Marley y Ciudadanos por el Lobo y por el Mundo Rural. Su labor se ha centrado en la divulgación y denuncia de actuaciones que perjudican la conservación del medio ambiente.
La exposición rinde homenaje a la labor de este gran naturalista con una selección de fotografías, cámaras, cintas de magnetofón, cuadernos de campo y recuerdos de sus documentales en la Amazonia, en tierra de masais y en Marruecos, recreando un ambiente de un gabinete naturalista.
La exposición rinde homenaje a la labor del gran naturalista con una selección de fotografías, cámaras, cintas de magnetofón, cuadernos de campo, recuerdos de sus documentales en la Amazonia, en tierra de masais, en Marruecos, hasta recrear un ambiente de un gabinete naturalista.
