Entre las calles Victoria y de la Cruz, en este lugar estaba la casa de Francisco de Viarte en la que había un pozo, por el entraros los soldados partidarios el archiduque Carlos durante la Guerra de Sucesión al trono español, hasta el convento de la Victoria , lo saquearon , robaron joyas, profanaron reliquias, como las espinas de la corona de Cristo que tiraron al pozo, y surgió el milagro, las aguas del pozo, amargas, se volvieron dulces y potables, llegando a curar. Parece ser que años mas tarde al sacar agua del pozo, aparecieron las espinas y el agua volvió a ser amarga.


En la calle del Pozo se encuentra la pastelería del mismo nombre, comercio centenario que conserva su fachada original, anaqueles, mostrador, y esta especializado en hojaldres, roscones de reyes, conocidos por todos los madrileños
VISITAS POR LA CARRERA DE SAN JERONIMO Y ALEDAÑOS
información y contacto callejeartemadrid@gmail.com